|
|
|
|
“PERCURAS” |
|

“As vacas e os bois estaban a medias cun percurador de M… , quen puxera os cartos para compralas”.
“Antes de todo chamaron o seu percurador, máis ladrón que Barrabas, que era o que lle tiña prestado a medio o gando a Antón e dixolle: Para mañán, xueves, que estea firmado o decreto de despoxo contra Antón da Ponte por ensolvencia na renta. ¡Ei, léveme o demo! respondeu “Percuras”, mirando o dreito, pois era birollo. ¿A ti non che pagan? Non ….e alégrome”.
“D. Domingo Viarteiro y Porras, juez de primera instancia del partido de M..decreto: Que a petición de D. Policarpo Sebes se notifique el desahucio del lugar que ocupa Antonio Luaces, por falta de pago de la renta convenida. Otro sí: Que asimismo se le notifique el embargo de los bueyes, dos vacas, un carnero, y un número de ovejas que no bajará de diez y puede subir a quince, cuyos animales son de la propiedad de D. Domingo Lenceiro, según documento que me exhibe este señor”.
M….20 de noviembre de 1870 (1).
El procurador que aparece citado en la novela con el mote de “Percuras” se llamaba D. Domingo Lence González. En el cementerio viejo, entrando por la puerta lateral y después de subir varias escaleras, en la primera fila de nichos colocados a mano derecha, existe la lápida pizarrosa que cierra uno de ellos y dice: propiedad de D. Domingo Lence y familia.
El padre de D. Domingo (D. Manuel) (2) fue el que costeó la erección de la edificación señalada con el número 2 de la actual calle de Lence Santar de Mondoñedo. Lugar donde nacería en 1876 D. Eduardo Lence Santar, futuro cronista de la ciudad episcopal.
El 8 de abril de 1850 contraen matrimonio en la parroquia de Santiago de Mondoñedo D. Domingo Lence, de treinta años, hijo de D. Manuel Lence, oriundo de la parroquia de San Julián de Pereiramá (Castroverde) y de Dª María González Lombardero, difunta, natural de San Julián de Villaformán (Trabada) con Dª Luisa Santar, de treinta años, hija de José González Santar y de Dª Josefa Trelles, difuntos. Fueron testigos del enlace matrimonial: D. Agustín Marentes, canónigo; D. Gil Díaz Lobán, presbítero y D. Pascual Orol, estudiante del Seminario (2).
D. Domingo fue padre de D. Agustín Lence Santar (+1904) y fue abuelo paterno de D. Eduardo Lence Santar (+1960), antiguo cronista de Mondoñedo y residentes en la calle Baja de Batitales de Mondoñedo.
(1)- Patricio Delgado Luaces “Xan de Masma”, “A Besta”, pág. 52 y 139.
(2)- AHDMF, parroquia de Santiago de Mondoñedo, libro 8 de matrimonios, folio 152.
|
|
|
|
GOTERAS MALEZA Y CRISTALES ROTOS |
|

Está fresco, ventoso y lluvioso el tiempo y según los meteorólogos, continuará así por algunos días. Muchas edificaciones del casco urbano de Mondoñedo se encuentran con los canalones rotos o incluso carecen de ellos, viéndonos muchas veces los peatones, sin necesitarlo, duchados con agua fresca. Si el chaparrón cae sobre el parabrisas de nuestros vehículos, perdemos un instante la visión del trazado de la calle y de posibles peatones y vehículos, con el consiguiente riesgo para todos. Si el chaparrón te cae sobre el paraguas, parece que se te va agujerear la tela o doblar el conjunto. En algunas ventanas y galerías de viviendas deshabitadas faltan muchos cristales lo que es aprovechado por las palomas para anidar en su interior y ensuciar el suelo de las aceras. Ya no digamos cuando nos invaden las gaviotas.
Ya en el mes de julio de 1912, siendo Alcalde de Mondoñedo el abogado D. Francisco Díaz Portas, se publica un bando ordenando el blanqueo de las fachadas de las casas que lo necesitaran, el arreglo de canalones, la limpieza de cloacas y el revoque de las paredes que dan a las calles. Aprovechando la publicación del citado bando, la prensa local pedía cortar las hierbas y maleza del cementerio.
Cuando accedió a la alcaldía a mediados de los años sesenta del siglo pasado D. Francisco Mayán Fernández, profesor y Director del Instituto, se renovó la petición a los propietarios y vecinos y además se prohibió sacar el estiércol de las cuadras del ganado durante el día, tender ropas en las ventanas y galerías e incluso, transportar lotes de “estrume” durante las horas diurnas para los domicilios.
Ya han transcurrido algo más de cien años de las primeras noticias sobre el mantenimiento del ornato público, pero las cosas no han progresado nada en las calles, edificaciones y entorno de la población de Mondoñedo. Continúan algunos canalones tirando agua a cáontaros (Plaza Concello, calles Febrero, Alfonso VII, Álvaro Cunqueiro, Leiras Pulpeiro, Obispo Sarmiento, Piscinas Municipales, Oficina de Turismo o Puente). La maleza invade algunas aceras o cuelga de los muros de algunas huertas, dificultando el tránsito de las personas (calles del Puente, Febrero, Leiras Pulpeiro, Rúa Villalba, Auditorio, Álvaro Cunqueiro o San Roque). Edificaciones en total ruina (calle Álvaro Cunqueiro, San Roque, Puente, Pascual Veiga, Pardo de Cela u Obispo Sarmiento) con importante riesgo para transeúntes y vehículos.
Les recordamos que por Mondoñedo discurre el trazado del camino Norte y otro alternativo a Santiago de Compostela, el casco urbano es considerado histórico artístico, es considerada una ciudad monumental, se encuentra en la relación de pueblos bonitos de España, etc. Como ciudadano de a pié, me duele escuchar a algunos visitantes: ¡Es un pueblo muy bonito pero está muy descuidado!
Como podemos observar, no hemos mejorado en el cuidado de las edificaciones y del pavimento de las calles, tampoco en su limpieza. Opinamos, que empeoramos en muchas cosas (limpieza de sumideros, ausencia de papeleras, puertas o escaparates llenos de carteles, etc), pese a disponer de más medios técnicos.
La despoblación del casco urbano de Mondoñedo, de abandonarse las tierras de cultivo, incluso las más cercanas a las viviendas, el envejecimiento de la población y la desidia de otros, hacen que transitar por las calles de Mondoñedo produzca cierta tristeza
|
|
|
|
|
|
|
|
|