En el lugar de Milladoiro, del barrio de Barbeitas, de la parroquia de Santiago de Mondoñedo, a la orilla de un viejo camino de carro y actualmente Camino de Santiago alternativo e inmediaciones de la ornacina de la familia Pardo, se encuentra colocada esta esbelta cruz de cantería. Cruz que se yergue del suelo unos 205 centímetros.
Junto a esta cruz y a la citada ornacina se detenían las conducciones de los cadáveres de los habitantes de la antigua Rilleira de Trigás y el sacerdote rezaba un responso. Otras veces era lugar propicio para realizar el relevo de los porteadores.
Cruz que fue costeada por el sacerdote D. Vicente Cora González (1853-1931). Al instante de ser colocada, fue bendecida por D. Vicente Cora (1). Enfrente de su domicilio y a la orilla del camino, también costeó la colocación de otra esbelta cruz, a la que le dedicaremos en un futuro próximo, otro apartado.
(1)- D. Vicente Cora González nació el 19 de enero de 1853 en el lugar de Sanguiñedo (Barbeitas). Era hijo de D. Joaquín Cora y de Dª Josefa González. Fue durante muchos años cura párroco de Alvare (Pastoriza). Sus restos mortales descansan en un nicho del viejo cementerio mindoniense.
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 Corría la temporada 1966/67. Un año más, el conjunto del Córdoba C.F. militaba en primera división. El 23 de abril de 1967 en el antiguo campo de San Mamés de Bilbao, el conjunto cordobesista formo con: José Ramón GARCÍA Fernández (Mondoñedo 1938-Córdoba 2004); Francisco LOPÉZ Cardosa, Simeón “SIMONET” Soler Pérez, Rafael “RAFAELIN” Fernández Ortega, José Luís NAVARRO del Valle, Ricard MARTI Samitier, Joaquín ORTIZ Saborit (portero suplente), Litri (masajista), LUÍS COSTA Juan, Lorenzo RIERA Penella, ALFONSO Pérez Brisimiri Juan “JUANÍN” García Díaz y José ÁLVAREZ Huerta. El resultado final fue de 3-0 a favor del conjunto vasco. Dirigía el conjunto andaluz el francés Marcel Domingo.
El equipo del Córdoba montó un dispositivo casi de cerrojo y realizó esporádicas acciones de ataque. El primer gol bilbaino fue logrado a los 37 minutos, tras un servicio de Orúe a Antón Arieta, que el delantero vasco en pugna con los defensas Navarro y Simonet, logra marcar. El segundo tanto llegó tras una buena combinación entre Fidel Uriarte y Arieta, yendo a parar la pelota a poder del jovencísimo Enrique Arraiz, que remató con su pierna izquierda a la red. En el minuto 43 es derribado Uriarte dentro del área. Ejecutó el máximo castigo el defensa Ignacio Sáez, pero García en una ágil estirada logra desviarlo, sin embargo, la defensa no está nada atenta y Arraiz recoge el rechace y lo mete en el área pequeña y un escurridizo Arieta, lo desvía a la red (1).
Por el conjunto bilbaino destacaron Sáez, Arieta y “Chechu” Rojo. Por el conjunto cordobesista, fue sin duda García y el trio defensivo.
En esa temporada el “Pichichi” de La Liga recayó en el jugador brasileño Waldo del Valencia, y el trofeo “Zamora” en el guardameta canario del Real Madrid, Betancort.
(1)- “La Noche”, núm. 14182, del 24 de abril de 1967, pág.12
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