
El Orfeón Pacheco de Mondoñedo, fundado en 1881 y formado por unas cincuenta voces, tomó su nombre de D. José Pacheco (1784-1865), Maestro de la capilla de música de la catedral durante unos sesenta años.
El día 1 de noviembre de 1883, festividad de Todos los Santos, bajo la batuta de D. Enrique F. de Parga, los componentes del Orfeón Pacheco de Mondoñedo se dirigen al cementerio municipal con intención de cantar ante el nicho del insigne músico. Cuando se hallaban cantando ante el nicho del célebre maestro y con motivo de haberse colocado una apilada multitud de espectadores en la parte superior de la hilera de nichos, se hundió la cubierta de uno de ellos, lo que ocasionó un gran susto y confusión entre los congregados (1).
Una vez recuperados del susto, los orfeonistas interpretaron diversas composiciones ante la tumba del fallecido director, D. Enrique Teijeiro Carranque. Afortunadamente, todo se quedó en un susto.
(1)- “El Eco de Tambo”, jueves 8 de noviembre de 1883, núm.231, pág.1.
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