
El barrio de San Vicente pertenecía a la antigua Rilleira de Trigás y ésta a la parroquia de Santiago de Mondoñedo. La parroquia de Santiago se hallaba ubicada en el interior de la catedral y los vecinos de San Vicente eran bautizados, se unían en matrimonio e incluso recibían sepultura en la misma.
En 1804 la Junta Suprema de Sanidad ha acordado la construcción de cementerios en todos los pueblos y aldeas de la Provincia, con arreglo a la Real Cédula de 3 de abril de 1787 y a la Circular del Consejo Real de 30 de junio de 1814. Se toma la decisión de dejar de enterrar en la catedral por razones sanitarias y se comienza el proyecto de construcción de un nuevo y cómodo cementerio en las inmediaciones del barrio de Os Castros; ?bien ventilado para que los olores que exalen los cadáveres no afecten a los moradores de la población y recomiendan que se debe de tener en consideración que no debe situarse en sitio donde escurran las aguas que puedan perjudicar la salud pública?.
El terreno elegido para cementerio provisional fue la huerta que llevaba en arriendo el canónigo D. Antonio León, perteneciente a la Fábrica de la catedral en las inmediaciones de Os Castros (1). Parece ser, por los documentos consultados, que surgen dificultades entre el ayuntamiento y el cabildo por esta nueva construcción y además, coincide esta etapa en que las tropas napoleónicas invaden España y desde finales de enero de 1809, Mondoñedo y su comarca.
Mientras duraron las obras del nuevo cementerio se permitió enterrar en las ermitas de los alrededores e incluso en las del Santísimo Cristo (también conocida como de S. Blas) y San Cristóbal del convento de Los Picos.
Al hallarse la nueva construcción en marcha, algunos vecinos de San Vicente que fallecieron en ese periodo de tiempo, recibieron sepultura en el interior de la capilla existente en dicho barrio. Cuando hemos dedicado una parte importante de nuestro tiempo libre en el Archivo Diocesano de Mondoñedo a buscar el origen de los apellidos Doural y Nogueira que llevan mis padres, me he encontrado con dos anotaciones de defunción de antepasados míos que recibieron sepultura en el interior de la citada capilla.
El primer enterramiento es el de Juana Doural Polo. Juana había nacido el 16 de abril de 1754 en el barrio de O Pedroso. Era hija de Francisco Polo Pérez y de Anastasia Doural Mel, natural del barrio de Ximil, parroquia de Santa María de Bretoña (Pastoriza). Juana se había casado el 19 de junio de 1775 con Juan Antonio Valoría López, natural del barrio de A Valiña. Juana Doural falleció el 17 de noviembre de 1809 y su cuerpo recibe sepultura en la capilla de San Vicente. Le quedaban de su matrimonio los hijos siguientes: Juan, casado con Antonia Fernández; María casada con Salvador Torres; Rosa y Dominga, solteras; José en el real servicio.
El segundo enterramiento es el de Juan da Nogueira Portela. Juan da Nogueira había nacido el 4 de febrero de 1781 en el barrio de O Pacio. Era hijo de Ramón da Nogueira, natural de Pausalido y de Gregoria da Portela, natural de Santiago de Moncelos (Abadín). Juan, de estado soltero, falleció el 17 de noviembre de 1809 y recibió sepultura en la capilla de San Vicente.
¡Curiosidades de la vida! Nuestros antepasados recibieron sepultura el mismo día.
(1)- D. Enrique Cal Pardo. Episcopologio Mindoniense, pág. 844.
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