 El Ilustrísimo señor obispo de Mondoñedo, Fray Antonio Alejandro Sarmiento de Sotomayor, con piadoso y justificado celo se dedicó a construir y fabricar una nueva cárcel y para vivienda del alcaide a la entrada del Campo de los Remedios. Al quedar libres las dos edificaciones dedicadas a cárceles eclesiástica y secular, decide aforarlas. Para realizar este acto se publicaron cédulas en los lugares públicos de costumbre durante tres días festivos, rematando en la tarde del día ocho de diciembre de 1749.
Hubo varias posturas a la edificación que se dedicó a cárcel secular, situada a la entrada de la Rúa de la Fuente, siendo la mayor postora Dª Tomasa de la Vega Montenegro, vecina de Mondoñedo y viuda de D. Cayetano de Riva y Otero en el canon de 66 reales de vellón por cada uno de los cien años, en que se remató.
Después de lo cual, para que constase su estado actual, acordaron nombrar por peritos de carpintería y mampostería para su reconocimiento a Antonio do Vale, maestro de carpintería y a José Méndez Camiña, maestro de cantería, ambos vecinos de Mondoñedo y quienes realizaron dicho reconocimiento.
Los peritos nombrados declararon que las paredes de los costados de la casa estaban seguras y habitables y que en la que corresponde a la cocina, necesita recebarse con cal y arena y que la pared de la fachada que da a la calle es preciso demolerla enteramente, así por ser la única puerta que tiene, muy baja y sus dos ventanas en disposición de cárcel. Del mismo modo, que para disponer de la edificación para vivienda, se necesita demoler los medianiles que tiene en el medio y lo mismo la pared de la parte de atrás, por su falta de seguridad.
En cuanto a la carpintería, se reconocieron los pisos destrozados y que apenas de toda ella podían valer una docena de tablas. Que a la parte de la calle, que es solamente de un piso, fayado, necesita una viga en el techo y que con la reedificación de la pared de la calle, también se destrozará el fayado. En la parte de atrás, que tiene dos altos, el cuarto superior no tiene fayado, las vigas no sirven y opinaban que en toda la casa se aprovecharan algunos pontones y que el techo, puertas y ventanas se necesitan hacer de nuevo.
Su Ilustrísima aforó el 19 de enero de 1750 a Dª Tomasa, para ella, sus hijos, herederos y sucesores, la referida edificación que sirvió de cárcel seglar pública situada en la calle de la Rúa de la Fuente, en medio de las que tiene D. Juan Antonio Lourido, presbítero y la viuda de Francisco de Acevedo, platero y hacía frente a la expresada calle y por la parte de atrás, confina en el callejón que hay en aquel sitio y es bien conocido.(1)
(1)- Archivo Histórico provincial de Lugo, protocolos notariales de D. Baltasar Sanjurjo Montenegro. Sig. 6243-5.
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