Durante el mes de abril de 1955, D. Felipe Bangueses Bande, párroco de Nuestra Señora del Carmen de Mondoñedo, escribió una carta a todos los sacerdotes de la diócesis sobre la conveniencia de rendir un homenaje al recordado obispo D. Manuel Fernández de Castro, al cumplirse 50 años de su desaparición. La carta fue muy bien acogida, especialmente por los sacerdotes que él ordenó.
El 27 de junio, en la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Carmen, que fuera creada por el expresado obispo, tuvo lugar una solemne función fúnebre, presidida por el obispo D. Mariano Vega Mestre, acompañado del cabildo, Ayuntamiento bajo mazas. Celebró la misa el Deán D. Vicente Saavedra, asistido por D. José Benito Fernández Quintana, párroco de Ramil y por D. Jesús Losada Ares, párroco de Villaronte. Se hallaron presentes varios sacerdotes que habían sido ordenados por el recordado prelado.
Se aprovechó tal ocasión para colocar en la sacristía de la citada iglesia parroquial los retratos del obispo homenajeado, del primer párroco de la parroquia y futuro obispo de Plasencia (D. Justo Rivas) y el del obispo D. Mariano Vega Mestre. A continuación se descubrió la lápida que dedicó el Ayuntamiento a la memoria del obispo Fernández de Castro, dando su nombre a la Avenida que desde el edificio dedicado a escuela pública en el barrio de los Molinos de Arriba llega hasta la iglesia parroquial del Carmen. Descubierta la lápida, el alcalde pronunció un pequeño discurso, elogiando al obispo difunto. Seguidamente tomó la palabra D. Mariano Vega Mestre e hizo una oración fúnebre. Terminó felicitando al Ayuntamiento por el acuerdo tomado y al cura párroco del Carmen por su iniciativa (1).
(1)-D. Enrique Cal Pardo, Estudios Mindonienses número 27, Episcopologio Mindoniense, página 510.