 José Francisco López Ocaña nace en la ciudad de Cádiz el 30 de marzo de 1743. Era hijo de D. José López Caamaño y de Dª María Ocaña García.
Pasa su infancia en su ciudad natal, estudia gramática en Grazalema, a los doce años filosofía con los P. P. Dominicos en Ronda y posteriormente vive en Ubrique junto a sus padres. Tomó el Santo Hábito en la iglesia de los Capuchinos de Sevilla el 12 de noviembre de 1757, cambiando su nombre de pila por el de Fray Diego José de Cádiz, ya con el hábito celebró su primera misa el trece de junio del año 1766.
Era un humilde religioso, vestido con un gastado sayal, calzado con unas sandalias, con el rostro tostado por las inclemencias meteorológicas, con su cuerpo enflaquecido por sus contÍnuas fatigas y con una alforjilla al hombro.
Salió desde Sevilla para Galicia el 18 de octubre del año 1794, en compañía del padre Miguel de Atura, un lego, y llevando también de compañía un jumentillo. Predica en diferentes puntos de Galicia y llega a la ciudad de Mondoñedo el 24 de marzo del año 1795 (1). Entró en la población por el Puente de Ruzos (actual Pasatiempo) y llega a la Fuente Vieja y al arco de la antigua muralla escuchándose su timbrada y clara voz a una considerable distancia, siendo recibido por la población con admiración y silencio. Tanta fue la afluencia de gente a las pláticas y sermones que dió en la catedral, que según la tradición el Padre tuvo que predicar al aire libre, haciéndolo desde un lugar elevado de la actual calle Álvaro Cunqueiro, en el bosque propiedad de Ricardo Paz, vecino de San Juan de Lagoa (Pastoriza) como lo pone de manifiesto una cruz de granito que se encontraba colocada sobre un pedestal en el trazado de la citada calle y que en el año 1921, con motivo de su adoquinado y construcción del muro lateral, se incrusta en éste. La cruz se conserva en perfecto estado, aunque la mayoría de los ciudadanos desconocen su origen. Terminada la misión en Mondoñedo el religioso se dirige a Ribadeo, donde predicaría dos días. Posteriormente lo hará en dirección a Oviedo.
La enfermedad se apodera de su debilitado cuerpo por tanto trabajo y concluye su corta vida el 24 de marzo del año 1801, contaba 58 años de edad, 41 de profesión religiosa y 30 de misiones.
El 24 de abril del año 1883 la Sagrada Congregación Ritos celebra ?Coram Pontifice", la vista y exámen de la causa y proceso para su beatificación y canonización. Fue beatificado el 22 de abril del año 1894 por su Santidad León XIII.
Las reliquias del Beato fueron colocadas mediante decreto de la S. C. de Ritos del 14 de marzo de 1923 en una urna de plata en la iglesia de los Padres Capuchinos de Sevilla.
En el casco antiguo de la ciudad de Cádiz existe una calle que lleva el nombre del Beato Fray Diego José de Cádiz. Hace unos años tuve la oportunidad de recorrer esta calle, de leer una placa que recuerda el lugar donde nació y de ver una estatua de bronce del Beato en un bonito jardín gaditano.
(1)- El futuro Obispo de Mondoñedo D. Andrés Aguiar y Caamaño (1798-1815) era familiar de Fray Diego José de Cádiz.
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